jueves, 1 de agosto de 2013

Agosto, el meridiano de todo

Espuela de caballero (Consolida ajacis)
Agosto ya está aquí y con él se equilibra la balanza del verano: todavía quedan muchos días de calor, pero ya queda menos para que el tiempo vuelva a suavizarse y podamos seguir disfrutando tanto de las plantas que quedan por dar lo mejor de sí como para poder comenzar en serio la puesta a punto para la próxima temporada y, por qué no, intentar preparar algún adelanto para el otoño-invierno. Eso sí, en estos días hay que armarse de paciencia, pues ni se puede plantar nada ni las plantas dejan de dar disgustos, estropeándose rápido, muriéndose incluso, y el calor hace poco agradable la estancia en la terraza; como casi siempre voy por la tarde, lo que me encuentro es a las pocas flores de temporada que quedan cerradas, o el viento hace imposible fotografiarlas (en especial cuando son plantas que no puedo meter en casa).

La entrada tendrá poquitas fotos y mucho texto, pero me es imposible colocar más imágenes dado que, como digo, las plantas están muy estropeadas o hay poca novedad que enseñar, y eso cuando no son efímeras. Aunque cuando reúna alguna foto más haré otra entrada sobre las compuestas -quizá la última hasta otoño- las situaciones que han ido viviendo algunas las comentaré aquí mismo. Veamos:

- En la primera foto aparece una espuela de caballero, Consolida ajacis. Me la encontré hace un par de fines de semana en el contenedor, en una de las esquinas traseras, y fue toda una sorpresa. La flor era grande y muy bonita, sin imperfecciones. Durante las siguientes tres visitas la tuve allí y conseguí hacer fotos aceptables, pero a la próxima la flor había desaparecido, literalmente: ni se había caído, ni secado, ni doblado al regarla. Parece ser que entraría algún pájaro y se llevaría la flor y media planta, pues sólo quedaban dos hojas. No sé qué esperaba el ave con esto, pues casi no han tocado ninguna otra planta y además esta precisamente es tóxica. No encontré siquiera rastros de que la hubieran depositado por allí en lugar de llevársela. Se trataba esta vez de una flor simple, mucho más bonita a mi parecer que las dobles que también tuve; seguramente surgió de las semillas mezcladas del ALDI.

- Han habido bastantes bajas, aunque muchas de anuales. La Lavatera trimestris se secó de repente, floreciendo, sin dar semillas. También retiré la Convolvulus tricolor de maceta que, sin embargo, se ha secado después de una vida plena, montones de flores y parece que unas cuantas cápsulas de semillas. La Centaurea depressa llegó al mismo punto, aunque no he encontrado ni una sola semilla. Mucho me temo que la planta quizá necesite la polinización cruzada con otros individuos y no sea capaz de autopolinizarse, con lo cual puedo dar su presencia en la terraza por terminada hasta que se diese la casualidad de que algún día volviese a la zona donde la recolecté, aunque si la planta definitivamente necesita de varios ejemplares de genética distinta para perpetuarse, dudo que lograse salir adelante en casa.

- Parece que en apenas unos días he perdido definitivamente a la Bidens ferulifolia. Algunas partes de la planta aparecían marrones, pero parecía que seguía brotando por otros puntos y todo iba bien -de hecho, se ha pasado este tiempo creciendo, y no floreciendo. Últimamente los brotes aparecían amarillentos y dañados, y no daba esperanzas de que se solucionase. Está toda seca, pero conservaré la maceta un tiempo por si rebrota o al menos veo que vuelve a regenerarse a partir de semillas caídas, como hizo la Mauranthemum paludosum, que le supuso una mejora exponencial. De todas formas, guardo muchísimas semillas de la Bidens y probaré con ellas. Y si no, podría considerar conseguir otro ejemplar del mismo sitio de donde la traje.

Malope trifida
- Finalmente conseguí que floreciera la Cosmos sulphureus, y es preciosa. El problema es que el primer día que fui, la única flor se estaba cerrando (parece que lo hace con la oscuridad, como muchas plantas) y dos días después los pétalos ya estaban estropeándose. He fotografiado una flor más o menos bien pero la planta da problemas como, por ejemplo, quemarse y doblarse los pedúnculos florales sin más, impidiendo que las flores reciban suministro energético y secándose. Esta situación de irregularidad ha sido continua con el crisantemo tricolor (Glebionis carinata), del que no he podido ni hacer fotos. Ha tenido unos cinco capítulos a lo largo de su vida y todos han salido deformes y con huecos sin pétalos, y he tenido que arrancarlo ya porque estaba totalmente seco. Repetiré, eso sí, pues me quedan semillas.

- La enorme Cosmos bipinnatus que crece en el contenedor fue medida hace poco y alcanza unos tremendos 115 cm. de altura. Como se veía venir, tanta altura, tanto viento y el sustrato secándose pronto hacen que la planta haya empezado a perder su rectilínea verticalidad y haya tenido que atarla para que no se doble más. Justo a sus pies, totalmente pegada, la planta que meses atrás me pareció una reina margarita (Callistephus chinensis) tiene toda la pinta de serlo, y no debe tardar ya en florecer. Hay que ir con cuidado con el conjunto, pues cada vez que la cosmos se mueve con el viento, presiona a la margarita. El contenedor sigue lleno de estas cosmos y sólo una está en flor, aunque parece que el verano no les sienta muy bien. En el otro extremo, una planta que no conseguía identificar al final ha revelado su identidad a través de las flores: se trataba de una Conyza canadensis, u otra especie muy similar, y ha acabado cortada y arrojada al compost.

- Una de las pocas plantas totalmente nuevas del contenedor y que os adelanto en esta entrada es la Malope trifida, una malva por lo visto veraniega, de muy vistosas flores. No he conseguido verlas por la mañana y supongo que durante esas horas estarán abiertas al máximo, más que en la foto. Si lo consigo le dedicaré una breve entrada.

- Como comenté, el contenedor de los bulbos ha tenido que ser vaciado por rotura del plástico y ello ha servido para hacer un recuento y puesta al día. Han sobrevivido, crecido y multiplicado estupendamente los narcisos, iris y crocus, así como los Muscari armeniacum y Chionodoxa forbesii, que no florecieron. Lo mismo para los jacintos, las Ixia y algunos gladiolos enanos. Han sobrevivido los Iris reticulata y unos pocos del cultivar 'Rhapsody' aunque bastante estropeados. Las Scilla siberica no tienen demasiado buena pinta, y parece que, al contrario de las demás, han "adelgazado", con lo cual quizá toque reponerlas o directamente olvidarme de ellas. Los tulipanes 'Red Riding Hood' han sobrevivido, pero no los 'Van Tubergen', y de los tarda apenas han quedado unos pocos bulbos pequeños; un año más, los Allium moly han aparecido brotados y secos -no tengo ni idea de por qué pasa esto- y otras especies, todas aquellas de las que no vi rastro cuando estaban las plantas creciendo, directamente se han volatilizado. Es decir, que si no brotaron cuando tocaba, posiblemente pasaron la temporada pudriéndose y convirtiéndose en compost. Muchas de ellas puede que las reponga este año porque quizá la culpa de que esto ocurriese fue plantarlas tan tarde.

- De los bulbos de verano también hablé hace poco y la situación es la esperada: no ha habido éxito. A lo largo del mes sacaré también todo lo que estaba en macetas (gladiolos abisinios, crocosmias y trigridias) para replantarlo en otoño. Únicamente siguen su camino los Ornithogalum saundersiae, aunque parece que les cueste crecer más y sigo sin ver señales de floración. Aunque, para estancamiento, el de la orquídea urna Bletilla striata. Creció y no ha cambiado (ni pierde hojas ni crecen más) desde hace ya casi dos meses. No creo que florezca aunque me alegra que siga bien, dado que es la única de las cuatro adquisiciones que hice en febrero a Eurobulb.nl que sigue visiblemente sana.

- Las dalias se quedaron estancadas y tras la poda total y sin regarlas desde hace al menos un mes, siguen teniendo los tallos verdes. Espero que, como el año pasado, rebroten en otoño y sigan floreciendo hasta mediados de éste. Lo mismo debería ocurrir con las Nerine bowdenii y espero que con el nardo (Polianthes tuberosa), que el año pasado no floreció y este año debería conseguirlo tras multiplicarse. Eso sí, es probable que los saque con tierra y todo y los ubique en el contenedor una vez hayan florecido, para que sigan su vida allí. Muchos bulbos que planté separados porque los esperaba más grandes en realidad cabrían perfectamente en este sitio y ganarían en espacio, y yo ahorraría mucho en agua, pues el contenedor ha demostrado ser un eficiente y equilibrado resguardo de humedad.

Asclepias tuberosa
- El áster (Symphyotrichum novi-belgii) sigue lidiando con los hongos. Con lo tarde que es, no termina de crecer y sigue en forma de roseta a ras de suelo con apenas dos tallos apuntando hacia arriba. Ya de por sí es increíble lo que está aguantando el ataque, pues otra planta quizá hubiera muerto hace tiempo. Posiblemente ya ni llegue a florecer, con lo que tendría que plantearme cambiarlo de maceta y hacerle una limpieza a fondo en invierno para probar a regenerarlo de cara a la temporada próxima.

- No se puede decir que hayan ido mal este año las aguileñas. Mientras que las híbridas han ido decayendo poco a poco -aunque siguen con hojas- incluso sacando alguna de esas flores que salen como por despecho, las alpinas, no entiendo muy bien por qué, empezaron a rebrotar y se han puesto verdes de nuevo, e incluso han aparecido flores de nuevo, pero más pequeñas y discretas. Me alegra este éxito puesto que el año pasado por estas fechas creo que no había nada más allá de algunas hojas solitarias que salían y duraban poco tiempo.

- Los lupinos sí se están echando atrás. Los más viejos han perdido casi todas las hojas y falta ver si el leñoso rizoma que han desarrollado será capaz de rebrotar cuando el tiempo mejore. No obstante, y para mi asombro, los que sembré en primavera permanecen verdes al sol y, es más, nunca han tenido los problemas de amarilleamiento de sus compañeros, así que quizá después de todo la planta no exige grandes cantidades de hierro sino que yo usé la tierra que más falta tenía de este elemento.

- Las dedaleras siguen haciendo frente al verano sin apenas ceder, con un buen montón de hojas todavía. A su lado, la Astilbe 'Glut' rebrota tímidamente y las Tricyrtis de momento están dándose mejor que ninguna de las temporadas anteriores, todavía frescas, rectas y muy altas; no obstante, no hay que cantar victoria todavía, pues en agosto aún pueden perder su frescura. Si no ocurre esto, la floración este año será espectacular. Mientras, a su lado, en la maceta de la dicentra están creciendo un montón de plántulas que no tengo ni idea de qué serán, pero por la proximidad, o bien son semillas de la propia planta que cayeron, o lo son de sus plantas vecinas, las mencionadas Digitalis y Astilbe.

- La hierbabuena (Mentha spicata) sigue en flor como comenté, por primera vez en todos los años que hace que la tengo. Para el año que viene me gustaría encontrarle un recipiente mayor y que conserve mejor la humedad a fin de evitar que decaiga a mediados de primavera y pierda el aspecto elegante que tiene hasta entonces, pues lo cierto es que las flores han salido en tallos caídos y con hojas muy estropeadas.

- A mediados de julio llegó a casa una nueva especie, pariente precisamente de la hierbabuena. Se trata de la Salvia farinacea, una bonita salvia de flores y tallos añil con hojas amplias de color verde claro. De momento está adaptándose, aunque parece estar costándole. La tuve que transplantar deprisa porque la pequeña maceta que traía, junto con la altura de la planta, eran la combinación perfecta para que el viento vespertino la tirase al suelo. Se dice que es una planta resistente a la sequía pero ya se sabe, aquí hay que vigilarla. Si el tiempo se vuelve muy seco y caluroso, las hojas se ponen mustias e incluso se caen estando verdes. Espero que no sufra más y en otoño se reponga.

- Otras lamiáceas siguen en el punto de mira. La Prunella ni florece ni parece ahora que quiera crecer, secándose más que nunca, así que le he quitado sol. La Lavandula stoechas parece estar en estivación, pues a pesar de no estar visiblemente muerta, se ha quedado suspendida en un estado seco, aunque con hojas aún tiernas, pero compactadas, así que también espero que el otoño la reavive. Las campanuláceas han tenido destinos tibios: las plantas de Campanula medium murieron sin florecer y la Campanula glomerata, tan bien hasta hace poco, está perdiendo hojas de manera alarmante. Esperemos que sólo sea una fase.

Dejaremos este resumen aquí de momento, para no extendernos demasiado. Básicamente, cualquier planta que no haya aparecido por aquí comentada o fotografiada, o bien ha terminado su ciclo o está momentáneamente parada. Entre las compuestas perennes muchas siguen a lo suyo, soportando los rigores del verano de mejor o peor manera (las gazanias y la Felicia son las que mejor lo llevan, como buenas plantas africanas que son) y las anuales cuesta hacerse con ellas en esta época.

He llevado a cabo un "plan B" para los semilleros, y es que han funcionado unos pocos, pero con matices. Los que ya tienen plántulas se han quedado en Cullera a fin de que puedan pasar a la terraza cuando estén preparados, pero otros no han conseguido hacer frente al calor. Los que empiece ahora, de nuevo de pruebas -o, siendo sincero, mejor decir que no escarmiento hasta que veo que es imposible del todo-, los haré en casa. El alféizar de la ventana ha resultado tener unas condiciones magníficas para sacar adelante plantas que ni se queman ni crecen alargadas por falta de luz, y de ahí salió en junio la Cosmos sulphureus para demostrarlo, y actualmente un chile habanero (Capsicum chinense) que ya se ha ido a Cullera a probar suerte. Si todo sale bien, podré tener listas para septiembre, de días más suaves, algunas plantas que consigan florecer para entonces.

Seguiremos pues viendo cómo se desarrolla agosto, si no es demasiado cruel, a la vez que nos impacientamos por la llegada de septiembre. Con él, se va el agobiante calor, vuelve una breve "segunda primavera", comienza la temporada de elección de bulbosas primaverales y, con ellas, la preparación general para las plantas del año próximo. De momento, paciencia y mucha agua.

2 comentarios :

  1. Me gusta mucho como escribes. Aunque no haya comentarios, a mí me gusta leer de vez en cuando tu blog.
    Un saludo.

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  2. Gracias por tu comentario, María Dolores. La verdad es que estos días son flojos en cuanto a contenidos y aunque me gustaría poner más fotos, hay poca novedad sobre la que escribir y mostrar. En vez de tener flores nuevas a cada visita, lo que hay son plantas secas. ¡Qué ganas de que llegue aunque sea el otoño!

    Saludos.

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