jueves, 11 de julio de 2013

Gladiolos enanos: mariposas botánicas

Gladiolo 'Atom'
Con los gladiolos enanos me he llevado este año una sorpresa. Más bien, quizá debería decir que he conocido una variedad mayor y gracias a ello me he maravillado con las formas que son capaces de ofrecer las flores de esta bulbosa de origen híbrido y, además, han sido de los pocos bulbos de verano que han conseguido florecer.

Primero, habría que hablar brevemente de los ejemplares del año pasado. Los compré en una tienda Schlecker, una franquicia alemana de pequeñas tiendas que se encuentra en mi zona y que parece que ha tenido problemas económicos. De hecho, en otoño trajeron bulbos, un poco tarde (finales de septiembre), pero en primavera ya no llegaron.  Estos los compré en primavera de 2012 y aunque crecieron bastante bien, sólo floreció uno, en junio, que iba abriendo flores a razón de una por día que se marchitaban antes de abrirse la siguiente: tras tres o cuatro flores, la planta terminó su floración. Puse la única foto de sus flores en la entrada que escribí a principios de año sobre las bulbosas de 2012. A lo largo del verano se fueron secando y llegado el otoño brotaron de nuevo, aunque no les sirvió de mucho dado que acabaron secándose a finales de primavera y este año no han florecido, pero los cormos parecen haberse beneficiado de su nueva ubicación y han engordado.

Gladiolo enano rosa-blanco
Los gladiolos enanos son una serie de híbridos y realmente eso de Gladiolus x nanus no sería del todo adecuado, ya que se trata de una hibridación artificial. Ésta es compleja y se compone de varias especies, todas ellas provenientes de África: Gladiolus alatus, G. cardinalis, G. carneus y G. undulatus. La hibridación fue llevada a cabo por Van Tubergen en Holanda hace un siglo, y precisamente en países con climas más fríos se aprecia la resistencia que estos gladiolos presentan a las bajas temperaturas, algo irrelevante aquí. Imagino que en climas frescos los gladiolos más grandes, también de origen sudafricano, sí corren el riesgo de malograrse con las heladas. Aquí, como digo, les es tan indiferente esto que pueden volver a brotar en otoño. Veré este año, que van a estar enterrados ya sin tocar más desde dicha estación, si crecen bien y florecen antes.

Gladiolo enano blanco-amarillo
A mi entender, tampoco son demasiado "enanos" dentro de lo que cabe, pues mis ejemplares más grandes han estado cerca de los 90 cm. de altura, quizá iguales o apenas medio metro menos que un gladiolo grande de verdad. Poseen espigas con menos flores que los gladiolos más grandes, los típicos de los ramos de floristería, y se abren unas cuantas a la vez. Parece que hay dos tipos básicos pues incluso las espigas antes de abrir son distintas, tanto que llegué a pensar que la última planta en florecer sería el Gladiolus callianthus.

Las plantas de este año son 15 cormos (unos pocos aparecen en esta entrada) de la colección "Exclusiv" de ALDI, que llega en febrero. La variedad parece distinta a la de los ofrecidos en Schlecker, aunque tampoco puedo saberlo si sólo me floreció uno. Éste tenía pétalos planos y puntiagudos, y los de ALDI han salido la mayoría de ellos similares a los gladiolos más grandes, con pétalos anchos e incurvados hacia atrás, y algunos de ellos con bordes ondulados. De los 15 cormos, calculo que han llegado a florecer hasta 10, y conté 6 tipos distintos de colores, los que aparecen en las fotos. Uno de ellos, el rojo con bordes blancos, lo he podido identificar como el cultivar 'Atom'. El resto de momento no consigo ubicarlos, aunque podrían ser simples mezclas aleatorias. Hay uno rojo más simple, similar al rosa del año pasado. Si encuentro sus nombres, iré editando la entrada.

Gladiolo 'Sapporo'
Su cultivo no puede ser más sencillo. Enterrados a unas tres veces su altura, o 7-10 cm., los cormos se plantaron a principios de marzo y a finales de mes ya asomaba alguna puntita. En junio han alcanzado una talla respetable, con unos 50 cm. sólo las hojas, que crecen pegadas en abanico similares a los iris rizomatosos. A principios del mes empezaron a abrirse las primeras flores, que abarcaron, con todas las plantas, unos 20-25 días alternándose. Semanas antes ya vemos las espigas, que en el caso de los de flores amplias son ovaladas y planas, con las brácteas muy rectas, y en los de flores más simples aparecen más separadas y con un cáliz más tubular. Además, parece que las de flores grandes abren 2-6 a la vez y las simples, solo una. Parece que lo del año pasado, aunque efímero, no era tan raro.

Gladiolo 'Mirella'
Requieren muy poca agua, con lo que apenas los he regado mientras florecían a la vez que aprovechaba para diluirles algo del abono granulado que esparcí a sus pies. Las hojas suelen ser bastante resistentes y a pesar de que empiecen a ponerse feas, tardan bastante en estropearse del todo. El único problema que presentan a veces es que al formar una palma tan plana y estar aferrados por un cormo, éste pivota cuando el viento incide sobre las hojas y llega en ocasiones a inclinar la planta casi hasta tumbarla. Esto ocurre en bulbosas relacionadas como Freesia o Sparaxis, muy similares aunque de menor talla. De momento no he tenido este problema, quizá por lo cerca que están de la pared.

Gladiolo enano rosa-púrpura
A fin de no hacerles gastar más energías de las necesarias, tan pronto como se marchitaba la última flor cortaba la espiga floral. Al hacer eso la planta queda algo fea, ya que dicha espiga crece tan apretada entre las hojas que es imposible eliminarla desde la base, quedando el pedúnculo truncado a la vista. De todos modos, no soy nada maniático a la hora de realizar este tipo de podas ya que prefiero anteponer la salud de la planta a la belleza ornamental, que ya ofrecen de manera suficiente cuando estalla la floración.

Así pues, tenemos con los gladiolos enanos una planta bulbosa de talla contenida, cuidados discretos y bellísima floración. Es posible que en macetas con suficiente profundidad y buen drenaje también lleguen a darse bien, pues sus cuidados no se diferencian demasiado de plantas populares resistentes como los Iris germanica o los jacintos. Una opción sin duda a tener en cuenta para llenar de color los últimos y cálidos días de la primavera con poco esfuerzo.

Nota (2017): Se han modificado las etiquetas de la entrada, no su contenido, para ajustarlas a una clasificación más acorde. Se ha eliminado el concepto erróneo de "Gladiolus x nanus" dejándolo sólo como "Nanus", que hace referencia a este grupo de especies y cultivares. Además se han añadido nombres específicos de algunos de los gladiolos de los que provienen determinados cultivares que aparecían en esta entrada. Estos cambios, como es lógico, se extenderán a todas las entradas donde se hablase de estas plantas.

No hay comentarios :

Publicar un comentario